Unos de los primeros síntomas que casi todas las mujeres tenemos al quedarnos embarazadas es la ausencia de la regla. Y digo casi todas porque yo conozco un caso (y seguro que hay más) en el que la mujer siguió teniendo el periodo mientras estaba embarazada de gemelas. Yo no he sido una excepción y si supe que estaba embarazada fue porque la regla se me atrasó un día (si, soy tan tremendamente puntual que con un día de retraso ya podía saber lo que estaba ocurriendo). Un test me bastó ese mismo día para confirmarlo y una visita a mi matrona la semana siguiente para corroborarlo.
Pequeña anotación para españolas: No hace falta comprarse un test en la farmacia para confirmar o desestimar un embarazo, la Seguridad Social tiene los mismos test de orina que los que te venden y te hace la prueba gratis. Basta con ir a donde tu matrona a primera hora con la orina de la mañana y te atiende en el acto (por lo menos fue mi caso, fui sin cita ni nada y me atendió en el momento y además ya me dio todos los papeles que necesitaba para ginecólogo, ecografías y demás).
A lo que iba el tema, el caso es que llevo cinco meses a estas alturas sin la regla, y la verdad es que no la echo en falta. La verdad es que solo me faltaba añadir esa pequeña molestia mensual a todas las demás cosillas que estoy pasando (y yo no me puedo quejar, que nunca me ha dolido la regla y me dura unos tres o cuatro días nada más) pero tenía la pésima costumbre de coincidirme con acontecimientos donde lo que menos deseas es estar con ella presente (tales como viajes, vacaciones, etc.) Son pocas las ocasiones en que me he librado, casi todos mis viajes han estado protagonizados por la "marea roja". Incluso en un crucero que hicimos en el 2006 me tocaba en todo el medio, y de esa me libré porque estaba tomando la píldora y me salté la semana de descanso (haciéndolo solo un mes o dos como máximo no hay peligro).
David me ha comentado en una ocasión "¿Qué? ¿Es mejor estar así o tener la regla?" y yo le dije que ya pondría la respuesta en el blog, pues que así mejor, porque estó nos trae un nuevo miembro a la familia que me llena de felicidad, y que al fin y al cabo lo de las nauseas y las visitas cara a cara a Roca terminarán algún día (a más tardar en 4 meses:-) y entoncés llegará el momento en que dejaremos de dormir y de disfrutar de la tranquilidad de ver una película después de cenar o cosillas así y tendremos que cambiar nuestras rutinas para adaptarnos a otras.
¿Qué si merece la pena cambiar la regla por un embarazo? Preguntarme dentro de 35 años cuando hayamos logrado echarles de casa (o nos hayan echado ellos a nosotros :-) y a lo mejor he cambiado de opinión. Ahora por el momento SI.